CON LA MIRADA DE UN NIÑO

EL MEJOR MEDICAMENTO

Para ser feliz no se necesita oro, ni dinero; si no amor, amistad y luz interior.

Cada vez mas pálida, la joven Mariana yacía en cama, dominada por una enfermedad misteriosa. La familia, muy rica, no escatimaba dinero para el tratamiento de la hija menor. Pero era todo en vano. La jovencita empeoraba día por día.

Una tarde, después de los acostumbrados exámenes, el médico particular de la familia llamó a las papás y les dijo:

- Quiero intentar el último, recurso. Si me permiten, llevaré a la joven conmigo a un paseo.

Los padres estuvieron de acuerdo. Al día siguiente, por la mañana pusieron a la joven en el carro del doctor. Después de estacionar junto a una choza dijo el doctor:

- Llegamos, vamos a hacer una breve visita.

Le ayudó a la joven a bajar del carro. Subieron por una pequeña escalera y entraron en la barraca. Parecía ser conocido de aquella familia, pues entró preguntando por la salud de la viuda y de los hijos. La jovencita lo observaba todo. Dejó algunos medicamentos y se despidió.

Al regresar de nuevo al carro, Mariana preguntó si volverían al día siguiente.

- Si, cuantas veces quieras volver - respondió el médico.

Al día siguiente, muy temprano, el doctor estacionó el carro junto a la puerta. La joven ya lo esperaba con varios paquetes. Entró solita al carro. Conversó animadamente. Al llegar a la barraca, fue ella quien más conversó.

El médico estaba satisfecho. Su nuevo método de curación estaba dando efecto. Volvieron muchas veces más. Después, ella sola con sus amigas. Ampliaron el círculo de amistades en el barrio de barracas.

Algunas semanas después, Mariana estaba curada, bonita y bien dispuesta. La curación comenzó cuando salió de sí misma para pensar en los demás.

"Cuando andes
buscando alegría
no pidas nada;
dalo tú todo."

AFERRATE A LOS SUEÑOS

"Aférrate a los sueños
porque si los sueños se extinguen
la vida es un pájaro con alas rotas
que no puede levantar el vuelo.

" Aférrate a los sueños
porque si los sueños pasan
la vida es un desierto
helado por la nieve. (Lngston Hughes)