La alergia a alimentos es una respuesta exagerada del organismo ante un alérgeno presente en un alimento, que por sí mismo es inofensivo para las personas no alérgicas. El organismo responde a este alérgeno, produciendo anticuerpos, fundamentalmente una inmunoglobulina denominada IgE, que es la responsable de los síntomas que el paciente va a presentar cuando entra en contacto con ese alimento. La unión del alérgeno y la IgE desencadenará la reacción alérgica.
Esta reacciones no sólo se producen cuando el paciente toma ese alimento, sino que también pueden ser ocasionadas tras la inhalación o contacto (legumbres, pescados, mariscos). Cualquier alimento es susceptible de provocar una reacción alérgica, aunque los más frecuentes en niños son la leche, huevos, y frutos secos
Este tipo de reacción suele ser inmediata en minutos o incluso segundos. Los síntomas incluyen urticaria, angioedema, que suelen ser los más frecuentes, y cuadros más severos con rinitis, asma, vómitos ,diarrea que pueden formar parte de un cuadro de alergia generalizada muy grave que se denomina shock anafiláctico que requiere tratamiento urgente a nivel hospitalario.
Según el estudio Alergológica 2005, de la SEAIC, las causas más frecuentes son las frutas (33.3%), frutos secos (26.0%), y mariscos (22.0%). En menores de 14 años son el huevo, leche, frutos secos, frutas y pescados
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