En los últimos años muchos estudios han demostrado que la linaza puede ser beneficiosa para un gran número de afecciones, desde el estreñimiento hasta la prevención del cáncer de mama o próstata. Es buena para reducir el colesterol, disminuir las probabilidades de sufrir un infarto y como protección de la visión.
Es una semilla que contiene una mezcla interesantísima de nutrientes, es la mejor fuente vegetal de ácidos grasos omega-3 y fitoestrógenos. Además, es rica en fibra tanto, soluble como insoluble. Algunos médicos que han realizado investigaciones sobre la linaza, advierten que no es recomendable su consumo por mujeres embarazadas o pacientes con cáncer que estén en tratamiento con tamoxifeno o medicamentos similares.
Respecto a estos últimos, la razón de la advertencia radica en que aparentemente los lignanos antagonizan la acción de ese tratamiento, y respecto a las mujeres embarazadas, el cuidado no radica en que la linaza sea dañina para el bebé, sino simplemente por precaución, porque aún se requieren más investigación para determinar todos sus efectos. Por sus efectos anti coagulantes, también las personas con problemas de coagulación deben consumirla con cuidado, para evitar inconvenientes.
Para incluirla en la dieta, hay varias formas, pero lo mejor es consumirla molida. Pues como aún no se sabe específicamente cuál de todos sus componentes es el responsable de los efectos positivos, la mejor forma es comer la semilla que contiene todos esos aceites esenciales. Y comer la semilla molida es aún mejor, pues el cuerpo la absorbe mejor de esta forma ya que la semillas enteras pasan por el tracto digestivo sin ser absorbidas.
Uno puede comprar las semillas y molerlas en un molino de café o incluso conseguirlas así en algunas tiendas de suplementos, donde ya vienen molidas. La dosis que se ha demostrado ser beneficiosa y segura es dos cucharadas por día (30 a 40 g). No se recomienda sobrepasar esa cantidad, ya que aun no se sabe si pueden ocurrir efectos adversos.
Una vez que la semilla es molida, lo mejor es almacenarla en el congelador en pequeñas porciones. Así podrán mantenerse hasta por 9 meses. Otra buena opción, no tan efectiva pero buena al fin, es prepararnos un rico té, sumamente efectivo para mejorar los problemas en las vías urinarias. Es un té perfecto para sanar las enfermedades de las vías urinarias, disminuir la inflamación de los riñones y la vejiga.
Ingredientes:
1 Lt. de Agua
30 Gr. De Semilla de Linaza
Preparación:
1.- En una olla pon el litro de agua y los 30 gr. De semillas de linaza.
2.- Deja hervir por un lapso de 25 minutos.
3.- Deja reposar el té.
4.- Cuela y Sirve en una tasa para Té.
elgranchef.com
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