4 feb 2010

Un truco para bajar de peso es comer en un plato de postre

Los especialistas recomiendan almorzar y cenar sólo lo necesario y porciones más chicas. Los alimentos deben contener todos los colores posibles, para garantizar que tengan variedad de vitaminas. No hay que saltearse las comidas. Los buenos hábitos son esenciales para adelgazar y alimentarse correctamente.

"Este es el último bocado". "Empiezo la dieta el lunes". Estas célebres mentiras son las que hacen tambalear la dieta y sumar kilos. Ya sea porque el plato estaba irresistible o por alguna cuestión emocional o cultural, es muy común comer más de lo necesario. La clave está en comer lo necesario. Pero para eso hay que saber qué necesita el cuerpo.
"Hay que pensarlo en forma individual, según las actividades físicas que se realice, el trabajo, las horas que se duerme, si se tiene hijos o no; todo eso influye. Hay que conocerse a uno mismo, y conocer los alimentos que tomamos habitualmente. Es decir, qué necesitamos y qué productos tienen esas propiedades para dárnoslo", dijo Flavia López, técnica en nutrición, a LA GACETA.

Algunas dietas muy populares consisten en reducir el tamaño del recipiente; almorzar en un plato más chico es una forma muy eficaz de comer lo justo. El tamaño de las porciones es una cuestión cultural, es algo aprendido más que una necesidad fisiológica, por eso es importante reconocer lo que realmente se necesita, según los especialistas.
"El problema es que ahora los platos vienen de distintos tamaños, entonces la gente se sirve el doble sin darse cuenta. Y eso hace que cada vez se coma más. Por eso muchas veces a las personas que quieren bajar de peso se les sugiere servirse en platos de postre, es una buena forma de evitar los excesos. Claro que también es muy importante que sea una comida de todos los colores. Es decir, que contenga todos los elementos de la pirámide nutricional", explicó la nutricionista Corina Medina Bascari, licenciada en nutrición.

Acompañar la ensalada
"Hay que acostumbrarse a ingerir porciones chicas. La gente suele comer un bife o una milanesa y acompañarla con una ensalada. Tiene que ser al revés, a la ensalada la acompañás con un pedazo de carne", aportó López. Junto con esto, masticar despacio es de gran ayuda. La sensación de hambre tarda en desaparecer, cuando una persona come, les toma tiempo a los nervios del tracto digestivo ordenarle al centro del hambre del cerebro que se cierre temporalmente. Por eso, si se come rápido, es muy probable que se ingiera más de lo necesario.

Las comidas muy sabrosas son, generalmente, las que tienen un alto contenido de grasas. Y cuando esto ocurre, la gente tiende a excederse. Por ejemplo, con las papas fritas es muy común que no se deje de comerlas hasta que se terminen. "Los alimentos con alto contenido en grasas, en hidratos de carbono y en calorías son los que más estimulan el apetito. Lo que yo recomiendo es ingerir productos que den más sensación de saciedad", dijo Medina Bascari.

Hacer las seis comidas

"Lo elemental para evitar los atracones es ingerir seis comidas al día, las cuatro principales y dos pequeñas colaciones. Una barrita de cereales o una gelatina, ambas dietéticas, pueden cumplir muy bien esa función. También puede ser un turrón si se quiere algo con más sabor.
También hay que ir variando y eligiendo según los gustos, queso por salut o pickles son una buena alternativa para los que prefieren alimentos salados", recomendó la especialista. Y aclaró que todo depende de las necesidades de cada uno.
"Es muy importante no saltearse ninguna comida. Asimismo, una buena manera de no cometer excesos en el almuerzo o en la cena es tomar una taza de caldo antes del plato principal. Este tiene que contener muchas fibras, que aportan sensación de saciedad", explicó Medina Bascari.
En definitiva, cuando se conocen las necesidades del cuerpo, podrá ser cierto que "este es el último bocado".

lagaceta.com.ar

No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...